La llegada de Alejandro Orfila puso a todos los futbolistas en igualdad de condiciones y le abrió una nueva chance a Ivo Mammini. Sin haber sido tenido en cuenta por Diego Flores y con la idea de irse rondando en su cabeza, el delantero dejó atrás la lesión a comienzos de 2025 y ahora va por su objetivo: volver a jugar y hacer goles. ¿Tendrá su oportunidad?
Criado en Estancia Chica y con raíces bien triperas, Ivo Mammini es, en Gimnasia, uno de esos jugadores que despiertan en el hincha el deseo de verlo jugar. Fue uno de los tantos pibes que Diego Maradona hizo debutar durante su paso por el club, y poco a poco logró hacerse un lugar en el plantel de Primera División. En abril de 2024 sufrió la rotura de ligamentos frente a River, en el Monumental, y luego de varios meses de recuperación, desde comienzos de 2025 volvió a estar a disposición.
La salida de Néstor Gorosito y aquella obligación que recayó sobre Sebastián Romero de jugar, en buena parte, con los pibes de Reserva a comienzos de 2023 —sumado a la lesión de Cristian Tarragona— le dieron a Ivo la chance de ganarse, por momentos, la consideración de Chirola. El contexto no lo ayudó y terminó diluyéndose cuando «Tarra» anotó el gol de penal que rompió la racha en el clásico frente a Estudiantes. Aun con la llegada de Leonardo Madelón en el segundo semestre, Mammini tuvo que esperar hasta 2024 para tener su oportunidad como titular.
En plena búsqueda de un reemplazante para los goles de un Tarragona que había decidido no renovar su contrato, Madelón optó por sumar a Franco Troyansky y Cristian Colmán. Pero lejos de ser una solución, ninguno de los dos estuvo a la altura del primer equipo. Fue entonces cuando el actual DT de Unión apostó por Ivo Mammini. Con el apoyo del público, el delantero categoría 2003 empezó a convertir y fue en ese momento cuando la rodilla le jugó una mala pasada: en la cancha de River, un fuerte dolor lo obligó a salir y, días más tarde, se confirmó la peor noticia: rotura de ligamentos. Fue intervenido quirúrgicamente y comenzó el largo proceso de recuperación.
Con Marcelo Méndez en el banco, Mammini renovó su contrato por una temporada más y volvió a entrenar con normalidad a comienzos de 2025. Sin embargo, con un Rodrigo Castillo en modo goleador y titular indiscutido, la pelea por un lugar se volvió más difícil. Esto retrasó su regreso a las canchas, especialmente teniendo en cuenta las derrotas consecutivas en el inicio del Apertura, que derivaron en la salida del entrenador uruguayo. La presencia interina de Fernando Zaniratto le dio una nueva oportunidad, aunque con poco rodaje.
El corto ciclo de Diego Flores estuvo marcado por la incoherencia en sus decisiones y la falta de claridad a la hora de armar un equipo competitivo. La constante rotación de jugadores terminó dinamitando su estadía en el Bosque, y eso también afectó el proceso de Ivo en el Lobo. Opacado por la titularidad de Norberto Briasco —quien nunca demostró tener verdadero compromiso con los colores triperos—, el delantero surgido en Estancia Chica pensó en buscar nuevos horizontes. Varios clubes del fútbol argentino consultaron por su ficha, aunque nunca se avanzó de manera concreta por su salida.
La llegada de Alejandro Orfila volvió a poner a todos los futbolistas en igualdad de condiciones, y eso le abrió nuevamente la puerta. La esperanza de volver a sumar minutos y gritar goles con la camiseta del club del que es hincha lo mantiene enfocado. Quedará en manos del ex Barracas Central definir si está para ser titular o no. Más allá de que pueda llegar algún otro delantero, su principal competencia es él mismo; luego aparecen Rodrigo Castillo y Jan Hurtado.
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