El Lobo empató sin goles ante Arsenal en El Viaducto por la decimocuarta fecha de la Superliga Argentina de Fútbol. Fue un encuentro para nada vistoso donde ninguno de los dos generó. Sin penas ni glorias. El Lobo ya piensa en su clásico rival.
Partido aburrido en Sarandí. Gimnasia llegaba enchufado después del triunfo en el Bosque y Arsenal golpeado y en última posición. A priori un partido ganable para el conjunto de Facundo Sava que en los primeros minutos de juego mostró más actitud, salió con ganas que se manifestaron en dos claras ocasiones interpretadas por Nicolás Dibble, la defensa bien plantada y la velocidad de Ezequiel Bonifacio.
A partir de los 15 minutos el Lobo se apagó y se acopló a su rival. Ninguno de los dos propuso más. Más allá de algunos lujos y pelotas paradas en los pies de Brahian Alemán, no pasó nada más. Y lo que quedó para el público fue esperar a que los minutos corrieran.
El Lobo formó con el mismo equipo que ante Rosario Central: Alexis MARTÍN ARIAS; Facundo OREJA, Maximiliano CORONEL, Omar ALDERETE; Ezequiel BONIFACIO, Fabian RINAUDO, Nicolás COLAZO; Lorenzo FARAVELLI, Brahian ALEMÁN; Nicolás DIBBLE y Franco NIELL.
Fue un encuentro chato donde prácticamente no se llegaron a las áreas, donde el campo de juego y el calor agobiante no contribuyeron. El entrenador tripero metió mano en el equipo y cerca de los 30 del complemento ingresaron: Facundo Pereyra y Agustín Bolívar por Nicolás Dibble y Lorenzo Faravelli. Hacia el final, el debut del último refuerzo: Jerónimo Barrarles reemplazó a Franco Niell. El delantero ingresó a los 41 minutos del segundo tiempo y tuvo una chance clara de gol que no pudo concretar.
Ahora se viene el clásico, el sábado a partir de las 17 horas en el Bosque y Gimnasia ya piensa en darle una alegría a su gente.
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