Gimnasia derrotó a San Lorenzo con gol de Facundo Pereyra a minutos del complemento. El Lobo fue más que su rival y pudo efectivizar su labor. Enorme tarea colectiva del equipo, pero para destacar: la aparición siempre determinante de Alemán, Pereyra y el gol, Alderete y su solidez defensiva, y, como siempre, la garra de Oreja.
Qué lindo es hablar de individualidades cuando cada una aporto casi homogéneamente a la totalidad del rendimiento del equipo. El Lobo superó a su rival que necesitaba ganar para no perderle pisada al puntero. Si ganaba, se ponía a solo 6 de Boca. Pero Gimnasia no lo dejó jugar y con un gran despliegue colectivo pudo convertir y quedarse con los tres puntos.
Si hay que elegir una figura, sin lugar a dudas, se trata del equipo. Pero no se puede dejar pasar la eficacia determinante que, como siempre, aporta el uruguayo Brahian Alemán. No fue su mejor partido, quizá, no. De todas maneras, la jugada del gol es casi toda suya. Con un control estupendo y un pase inmejorable, se la dejó servida al Gordo Pereyra para que hiciera lo propio.
Facundo Pereyra es otro que merece estar en el podio, por su entrega y por convertir el gol de la victoria. Tan ansiado por el Lobo, que venía flojo en definición, y por él mismo que marcó su primer tanto desde su regreso al club. La última vez que gritó fue en 2014 ante Argentinos Juniors.
El fondo está cada vez más sólido y uno de sus grandes motores es Omar Alderete que viene manteniendo una estabilidad satisfactoria. Ante el Cuervo fue fundamental, tuvo un gran partido, anticipó en todas y presionó bien en ataque. Con seguridad y calidad en las salidas, el paraguayo fue de lo mejor.
Últimamente no puede dejarse fuera de lo destacado a Facundo Oreja, quien partido tras partido demuestra por qué su nombre es coreado por la gente y por qué se lleva tantas condecoraciones desde la tribuna. Metió más que nunca y tuvo un enorme despliegue en toda la chance. Pura garra.
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