El juvenil es fruto de nuestra cantera y se suma a la plantilla profesional de Gimnasia. Es volante categoría 98, está en el Lobo desde los 13 años y debutó de la mano del Indio Ortíz en el interinato post Sava ante Independiente.
Patricio Monti firmó su primer contrato profesional con el Lobo hasta junio de 2022. El juvenil volante categoría 98 debutó el domingo 6 de mayo del año pasado ante Independiente en el Estadio Libertadores de América por la fecha 26 de la Superliga 2017/2018.
“Cuando me llama el Indio [Ortíz] para entrar, me puse como loco, me saqué la pechera, me paré al lado suyo y me dio un par de indicaciones, pero la pelota no se iba más afuera y yo tenía muchas ganas de entrar”, dijo Pato Monti a Mundo Tripero Radio.
El juvenil es fruto de nuestra cantera y tuvo la posibilidad de ingresar a los 66 minutos de partido. “Unos nervios tenía, pero por suerte estuve tranquilo y lo disfruté, entré contento, con ganas y con el pensamiento de disfrutarlo más que nada”.
Desde los 13 años está en el club, es hincha del Lobo y por eso la emoción es aún más grande: “Fue lo más lindo de mi vida, no lo podía creer, lo disfruté muchísimo, fue un momento único y por suerte se dio de la mejor manera”. Es que el Lobo, con el empate 2 a 2, dejó atrás la racha de seis derrotas consecutivas. En este sentido, dijo: “Sirvió en lo grupal y en lo personal, muy feliz”.
Después tuvo la posibilidad de meterse como titular en el encuentro ante River en el Monumental, en lo que fue la previa de la final de la Copa Argentina, y varios fueron los pubes que tuvieron la posibilidad de mostrarse. Con Troglio en el banco, fue 3 a 1 para el Millonario.
Pedro lo convocó como titular también para lo que fue la derrota 1 a 0 ante Defensa y Justicia. Más tarde, el Indio como DT formal, lo metió en el clásico para disputar el segundo tiempo, y contra Independiente nuevamente (en lo que fue el mejor partido de la era Ortiz), donde jugó 18 minutos.
Pato acumuló dos amarillas y, cabe destacar, que las últimas dos fechas jugó en la reserva de Leandro Martini y Mariano Messera.
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