No ha pasado más de un mes desde que la Comisión Directiva actual asumió su cargo, sin embargo desde dicho tiempo las aguas no calman.
Pese a que los distintos sectores de la política Mens Sana buscaron tirar para el mismo lado las malas gestiones de comisiones anteriores están repercutiendo ahora. Las bombas que llevaron años guardadas en un cajón comenzaron a explotar.
Esta vez le tocó a la archivada en 1998 cuando Héctor Atilio Delmar hacía las veces de presidente de la Institución. La causa cuenta de una venta de Andrés Gugliemipietro al Milán de Italia, y un posterior reclamo de su representante, Juan Simón.
En el año 1998 el volante creativo nacido en San Nicolás de Los Arroyos fue vendido al AC Milán en 5,6 millones de dólares. Un negocio que a simple vista era fructífero para las arcas del club, haber formado un jugador y venderlo al exterior.
Cuando todo parecía color de rosas comenzó a oscurecerse. Los dirigentes del lobo tuvieron que brindarle 1,1 millones de dólares a Renato Cesarini (le correspondía una porción de la venta) y tendrían que haberle dado casi un millón a Hugo Issa y Juan Simón, quienes habían adelantado dinero a cambio de una prioridad de venta que nunca ejercieron, pero no lo hicieron.
Los representantes del guly no se quedaron de brazos cruzados y le hicieron un juicio al club por U$D 800.000, los cuales deberían haberse pagado con los casi 6 millones de la venta pero no fue así. El primer falló, en 2007, fue a favor de Gimnasia ya que los jueces determinaron que tanto Issa como Simón no tenían los derechos federativos del jugador, sin embargo 7 años después hubo un nueva resolución en la Corte Suprema de Justicia.
En 2014 Gimnasia perdió el juicio pero, tanto Daniel Onofri como Bernardo Supera, presentaron un recuerso de amparo para que el juicio se revea y así ganar tiempo para no ser más CD, y no tener que abonar la deuda.
El día de hoy, llegó la notificación de la Corte Suprema de Justicia de que el Club Gimnasia y Esgrima La Plata tendrá que pagar la suma de U$D 6.000.000 a Juan Simón por dicho juicio. Muy alto número para una Comisión que está dando los primeros pasos.
Existe una instancia judicial más por lo que Pellegrino y compañía piensan apelar el falló. La nueva Comisión Directiva tiene un campo minado y debe cuidarse en cada movimiento porque las bombas no van a dejar de aparecer.
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