Mauro Dávila y Fermín Irisarri visitaron Mundo Tripero para dialogar sobre su presente en la reserva del Lobo. Los categoría 2003 destacaron su su cariño por el club y compartieron sus expectativas para el futuro.
Los ahora dirigidos por Lucas Lobos estuvieron en los estudios de la FM 96.7 donde trazaron un balance del primer semestre y dejaron bien en claro su sentido de pertenencia con Gimnasia. Mauro Dávila llegó de Mendoza con edad de quinta división, mientras que el platense Fermín Irisarri se sumó en infantiles. Los dos aman al club.
«Gimnasia es mi vida. Me levanto, me pongo la camiseta, y me voy a dormir y sigo vistiendola. Así todos los días. No puedo imaginar la vida de otra manera», manifestó Fermín y a su turno, Mauro dijo: «Gimnasia me dio todo cuando no tenía ni para comer. Me cambió la vida. Estoy recontra agradecido».
Ambos son parte de un presente que los tiene a los más jovenes como protagonistas, pero aseguran estar «tranquilos y disfrutando de lo que nos gusta», y además afirmaron: «Estar en Gimansia es muy lindo, Estancia se está poniendo cada vez mejor».
Los dos tuvieron la chance de trabajar con Lobos y Chirola. Al respecto contaron: «Conocen al club mucho y saben como se maneja el club. Capaz que hay más intensidad en chirola, las formas de ser. También jugaban disginto, Lucas era más detallista y sutil, y Chiro era más del vamos, vamos». Además sostuvieron: «Siempre tuvieron total confianza para contarles cualquier tema personal, siempre tuvieron mucha predisposición para acompañarnos y apoyarnos».
En otro orden ee cosas, Dávila contó: «Yo jugaba en Gimnasia de Mendoza y ahí no nos daban ni ropa, y cuando llegué acá no lo podía creer que nos daban Indumentaria y frutas, cereales después de las prácticas. Fue hermoso encontrarme con Estancia Chica».
Por su parte, Fermín decieio destacar el rol de Roselli. «Rodri me marcó mucho. Se destaca mucho por como es como persona, además que es un técnico increíble esta muy encima y muy pendiente de lo que nos pasa a cada uno».
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