Gimnasia cayó 3 a 0 en el Bosque frente a un Racing que dio muestras de por qué es el puntero del torneo. El Lobo no pudo concretar, no estuvo preciso ni eficaz y el rival aprovechó para golpear. No hay que condenar, pero sí poner atención para revertir con urgencia estas dos derrotas consecutivas y lograr triunfar en la que se viene ante San Martín. No hay más puntos por resignar.
Era una tarde donde todas las cámaras y miradas estaban puestas en la ribera capitalina. Sin embargo en el Bosque de La Plata jugaba el Lobo con lo que, para cada uno de los triperos, era una gran final para poder dejar atrás el mal trago que significó la caída en Córdoba, la fecha pasada.
El Gimnasia de Pedro Troglio recibió al Racing puntero del “Chacho” Coudet por la fecha 12 de la Superliga. Y necesitaba ganar, sí. Cuanto menos un empata, claro. Pero nunca perder, menos después de haber perdido tres puntos ante un rival directo como Belgrano. Perdió, fue por 3 a 0. ¿Y por qué? ¿Otra vez? Sí, otra vez, pero se trató de otra versión del equipo. Ni la que le ganó a Boca, ni la que perdió ante el Pirata.
Hoy el Lobo contaba con los regresos de Santiago Silva y Facundo Oreja, recuperados de las anginas y de una tendinitis, respectivamente. Además, en lugar de Gonzalo Piovi que no pudo ser de la partida, por ser jugador de la Academia, ingresó Germán Guiffrey.
Alexis MARTÍN ARIAS; Facundo OREJA, Maximiliano CORONEL, Germán GUIFFREY, Matías MELLUSO; Maximiliano COMBA, Fabián RINAUDO, Lorenzo FARAVELLI, Matías GÓMEZ; Horacio TIJANOVICH y Santiago SILVA, fueron los once que saltaron al campo –impecable- del Juan Carmelo Zerillo. En el banco estuvieron Sebastián MOYANO, Manuel GUANINI, Lucas LICHT, Agustín BOLÍVAR, Hernán TIFNER, Jan HURTADO, Mauro GUEVGEOZIÁN.
De entrada los triperos intentaron y tuvieron varias aproximaciones como la de Maxi Comba luego de un gran pase de Tijanovich en la primera parte. El cordobés quedó justo frente al arco pero direccionó mal, justo a las manos del arquero. Por su parte, el nuestro, Alexis Martín Arias, tuvo un puñado de tapadas determinantes. A los 15 minutos ya había tenido dos intervenciones fundamentales para mantener el arco en cero. Pero se le hizo imposible a los 31 minutos atajar un cabezazo perfecto de Centurión que abrió el marcador para la visita. Uno a cero y al vestuario.
En el complemento, apenas a los 8 minutos, Lisandro López en soledad definió en el arco del Bosque custodiado por Alexis. A los 39, mano de Rinaudo dentro del área, penal y “Licha” que sentencia el 3 a 0.
El DT tripero intentó con un equipo más ofensivo, con los ingresos de Hurtado por Coronel, y Licth por Oreja -que esta tarde cumplió 200 partidos con la camiseta del Lobo y recibió un reconocimiento del Club-. No fue suficiente y, como dijo el mismo Troglio: “La diferencia estuvo en las áreas”. Ellos pudieron convertir, nosotros no. Pero no hay que conformarse con esa explicación, ni preocuparse. Si, por supuesto, ocuparse porque ya no hay más puntos por resignar. La que viene en el Bosque ante San Martín de San Juan hay que ganar.
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