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Gimnasia volvió al Bosque por la fecha 9 de la Liga Profesional y cayó frente a Rosario Central por 1-0. Más allá de haber dominado gran parte del partido, una desinteligencia en el fondo lo volvió a dejar con las manos vacías. Sebastián Zunino fue el encargado de impartir justicia.

Tras la derrota en el clásico y una semana caliente en cuanto a lo institucional, Gimnasia quería encontrar en su casa y con su gente la luz al final del túnel para empezar a cambiar el rumbo en el campeonato local. Con Juan Cruz Esquivel como la única cara nueva, cambios de nombres y esquema, Marcelo Méndez armó su once con tres en el fondo y sin la presencia de Pablo De Blasis.

Más allá del cambio de horario y la jornada laboral en el medio, el hincha copó el Bosque para alentar a un equipo que no logra levantar cabeza, ni siquiera dominando la pelota, creando jugadas de peligro y convirtiendo en figura al arquero rival. Cómo una película de terror o un cachetazo del destino, el Lobo no consigue ponerse de pie y sin sufrir casi en defensa, se encontró abajo en el marcador.

Obligado a ser protagonista y quien lleve adelante las condiciones del partido, el equipo de Méndez salto al campo de juego a encontrarse por primera vez con el hincha después del golpe en el clásico. La respuesta fue buena y desde sus laterales logró inquietar en más de una oportunidad a Jorge Broun. David Zalazar estuvo activo al igual que Nicolás Garayalde quién fue el encargado de ordenar el medio. Pero claro, los puntos solo se logran si la pelota entra adentro del arco y en eso, sin dudas que falló.

Tras el descanso y después de haber perdido la pelota por unos minutos, el tripero encontró en los pies de Benjamín Domínguez acortar distancia hacía campo rival y una de las ocasiones más claras para ponerse en ventaja, un remate desde la medialuna del área que Broun mandó al córner volando para la foto. En continuación y tras el tiro de esquina, Juan Cruz Cortazzo se elevó en soledad y sacó un cabezazo a quemarropa, que contuvo espectacularmente el arquero Canalla. Para colmo, Juan Cruz Esquivel hizo su debut, y a los pocos minutos se fue expulsado por doble amonestación, como una premonición de lo que se iba a venir. El visitante se encontró con una contra letal y casi sin haber pateado al arco, Tomas O’Connor venció a Marcos Ledesma y sentenció el 0-1 final.

Lejos de ser algo positivo y que por primera vez después de mucho tiempo se haya encontrado con viento a favor, desde la dirigencia deben cerrar cuánto antes la llegada de refuerzos. En la jornada de hoy y a pesar de haberse llevado los tres puntos, Rosario Central no pudo hacer pesar su jerarquía y fue en parte por el trabajo de un plantel muy diminuto y falto de variantes. Ya cuando el partido llegaba a su final, el DT uruguayo decidió mandar a la cancha a Santino Primante quién subió desde la reserva, hizo su debut y compartió delantera con Rodrigo Castillo, otro salido de Estancia.

No será para nada sencilla la agenda del Lobo en las próximas semanas y claramente atentan contra el objetivo que es volver a ganar. Racing será el rival por la décima fecha este viernes en Avellaneda, después se viene River en el Zerillo y Belgrano en Córdoba.

SÍNTESIS DEL PARTIDO:

Gimnasia (0): 13- Marcos Ledesma; 15- Juan Pintado, 35- Juan Cruz Cortazzo, 4- Leonardo Morales, 20- Yonathan Cabral, 18- Nicolás Colazo; 19- Lucas Castro, 36- Nicolás Garayalde, 11- David Zalazar; 7- Benjamín Domínguez y 30- Rodrigo Castillo. DT: Marcelo Méndez.

Rosario Central (1): 1- Jorge Broun; 32- Emanuel Coronel, 15- Facundo Mallo, 2- Carlos Quintana, 3- Agustín Sández; 16- Mauricio Martínez, 5- Franco Ibarra, 8- Jonatan Gómez; 22- Lautaro Giaccone, 9- Marco Ruben y 13- Jaminton Campaz. DT: Matías Lequi.

Árbitro : Sebastián Zunino.

VAR : Jorge Baliño.

Estadio: Juan Carmelo Zerillo.

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