El 2016 no fue un año más en Gimnasia y Esgrima La Plata, y no hablo por lo deportivo, no nos fue tan bien pese a haber clasificado a la Sudamericana y haber jugado la semifinal de la Copa Argentina. Tampoco hablo por año político, que ha dejado un nuevo presidente y merece un párrafo aparte aunque no en esta oportunidad, hablo de un hecho con H mayúscula, un hecho que quedó marcado en todos los que pensamos en BOSQUE.
El partido frente a Velez Sarsfield, de la primera fecha del torneo Copa Independencia 2016 fue uno de los días más importantes en la institución y aseguro que quedo grabado a fuego ese 28 de agosto de 2016 en muchos de nosotros. Recuerdo patente dicha jornada de lluvia, cómo estaba vestido, y hasta la formación. Sí, todo.
¿Por qué fue tan importante? Capaz no te acuerdes pero hace dos años ahí, donde hoy hay una platea, había un hueco gigante que te permitía ver los colectivos que pasaban por la calle 60. Ahí no había nada, sólo recuerdos de un nefasto pasado donde dirigentes prefirieron jugar en un estadio alquilado y no en el propio, al que había ido mi abuelo, fue mi viejo y voy yo, al que fuimos y vamos todos.
Repito la pregunta, por qué fue tan importante, porque significó la lucha del socio, del hincha genuino del club, por lo propio. La lucha que comenzó con Nestór Basile y que la continuamos nosotros. Aquel 2006 parecía una batalla perdida pero las únicas que se pierden son las que se abandonan y no esta en nuestra sangre hacerlo. Pudieron haber tirado tribuna pero resistimos, y por eso volvimos, por eso luchamos y por eso hoy cuando te paras en cualquier parte del Juan Carmelo Zerillo notas la Platea H Nestór Basile más radiante que nunca.
En el 2009 parecía inalcanzable el sueño de una platea nueva pero el proyecto del Arquietecto Diaz, junto con muchos socios más, después de años de trabajo dio sus frutos. Sí, recién se inauguraron los palcos y los nuevos bancos de suplentes, aún falta la segunda bandeja y mucho terreno por recorrer para culminarlo pero hoy Nestór Basile desde el cielo mira como las nuevas generaciones se sientan en la Platea H y respiran BOSQUE.
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