La primera presentación de Gimnasia en el 2017 fue más que pobre. La amplía diferencia, no solo en el marcador, sino en el juego abrió la pregunta de cómo será el semestre Mens Sana con doble competencia.
Gimnasia jugó en Mar del Plata con un equipo muleto, frente a un Banfield que tenía en el lomo sólo tres entrenamientos de pretemporada, pero los porotos se ven en la cancha.
Con rendimientos muy bajos, el Lobo se fue al descanso ganando 1-0 con gol de Pablo Vegetti, y dos llegadas claras de Faravelli en el comienzo del encuentro. Sin embargo, en todo momento la pelota la manejo el rival. Los de Alfaro buscaban replegarse y salir de contra.
El segundo tiempo podría ponerse en un cuadro de todas las cosas que no hay que hacer en un partido. Entró del entretiempo dormido, le convirtieron muy rápido el empate y no supo reaccionar. Dos goles en contra. Muchos foul alrededor del área (uno terminó en gol). Muchas fallas que terminan marcando el por qué del abultado resultado.
En líneas generales, Gimnasia tuvo un partido para el olvido pero no es el Gimnasia que espera el hincha Mens Sana este, sino el que jugará el jueves frente a Racing. La mayoría de los titulares serán de la partida, y hasta tendrán minutos de juego los suplentes. Pese a que estén duros de la pretemporada, deben cambiar la imagen urgente.
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