Transitando las últimas seis fechas de la Liga Profesional, el análisis del Gimnasia de Sebastián Romero y los pibes es más que positivo, pero siendo conscientes que hay muchas falencias para corregir y se necesitan jugadores de jerarquía en puestos puntuales. Con la posibilidad de volver a sumar refuerzos, desde la dirigencia ya piensan en el mercado de pases y en la temporada que se viene.
Tomando como referencia la formación del equipo de Néstor Gorosito que terminó jugando en los últimos meses del 2022 con nombres rutilantes y de gran nivel, el cambio al conjunto de jugadores que le tocó agarrar a Chirola a la hora de asumir fue muy brusco. No solo no pudo contar con la mayoría de ellos, sino que tampoco se pudo salir en la búsqueda de nuevos futbolistas por las inhibiciones que arrastraba el club.
Teniendo en cuenta las probables salidas y la falta de experiencia en el plantel actual se imponen algunas llegadas y desde calle 4 se empieza a evaluar los sectores a dónde el equipo estuvo más flojo y las necesidades que plantea el cuerpo técnico para afrontar la Copa de la Liga en la última parte del año. Además de los nombres que siempre suenan, hijos pródigos de la casa y que son una tentación cada vez que se abre el libro de pases.
Mas allá de algunos puntuales o de sondeos que se hagan, las figuras de Fernando Monetti, Pablo de Blasis, Luciano Aued, Franco Mussis y Lucas Castro siempre están sobre la mesa y el deseo de que peguen la vuelta es el mismo tanto para los hinchas como para la dirigencia. Pero ¿Qué le sirve a Gimnasia?, ¿Qué jugadores se deben ir a buscar para no tapar a los juveniles que surgieron en este semestre?, ¿Cómo es la actualidad de ellos?
Si bien el equipo está holgado en la tabla de posiciones anual y el descenso no es algo que asuste, la llegada de las nuevas incorporaciones tiene que ser un plus para el equipo de los pibes y adaptarse rápidamente a la idea del entrenador tripero para seguir escalando posiciones y soñar con una clasificación a un torneo internacional. Por esta razón es la importancia de las piezas que se muevan en las próximas semanas, ya que definirán como terminará el 2023 del Lobo.
Uno de los principales lugares dónde es necesario sumar es la defensa, con Leonardo Morales y Felipe Sánchez como titulares afianzados y Bruno Palazzo como relevo inmediato, la llegada de un central para competir es importante. Además, Germán Guiffrey está para volver y en los laterales se puede sufrir alguna baja y la idea es no dejar desprotegida esa zona.
Mas adelante en el campo y con Ignacio Miramón en un gran momento, Sebastián Romero aún no pudo encontrarle un acompañante. Nacho fue titular en la mayor parte de los partidos, pero siempre con un mediocampista diferente al lado. Agustín Bolívar parecía ser el ideal, hasta que volvió al banco de suplentes. También probó con Nicolás Sánchez, Leandro Mamut y estas últimas fechas lo está haciendo con Antonio Napolitano. Sabiendo bien que el 5 es inamovible, un nombre de experiencia en esa posición no vendría nada mal.
Otro de los pibes que se destapó y llamó la atención de muchos es Alan Lescano, quién fuese autor de varios goles en este campeonato y muy importante en el juego del equipo. En muchas oportunidades, fue su desarrollo individual lo que le dio al tripero ese toque distintivo para cerrar un partido y la idea es contar con otros nombres para liberar al Pupi y que no pase por él solo la responsabilidad.
Con todos sus nombres en dudas, la zona de ataque es una verdadera incógnita. Cristian Tarragona tiene contrato hasta diciembre, pero con la chance de rescindir e irse en las próximas semanas, Ivo Mammini está pronto a firmar y Franco Soldano está, pero su mejor versión es jugando más atrás, siendo por momentos un mediocampista más. Así mismo, ya no está Nicolás Contín que rescindió contrato y se fue al Sports Boys de Perú.
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