Bautista Merlini, habló en Mundo Tripero por FM Raíces Rock 88.9 tras el histórico triunfo del Lobo frente a River en el Monumental y dejó varias reflexiones sobre el momento futbolístico y anímico del equipo.
“Feliz, habíamos tenido una muy buena semana y media de entrenamientos, y nos sentíamos confiados. Por suerte salió lo que salimos a plantearle a River”, expresó Merlini, destacando la preparación previa y el compromiso del grupo.
El volante reconoció que el equipo arrastraba una deuda con el hincha: “Veníamos de partidos complicados. Tenemos jugadores para jugar mejor y por diferentes motivos no lo podíamos hacer. Sin dudas estábamos con deuda con la gente. Tuvimos muchas charlas hacia adentro, con mucha autocrítica. Tenemos que estar unidos, pero intentando jugar al fútbol también”.
Sobre el arbitraje, fue contundente: “Lo del árbitro fue increíble. Le dije que nosotros nos jugamos cosas muy importantes, nos iba a sacar puntos que para nosotros eran muy valiosos. El penal para ellos fue inexistente y los 9 minutos adicionados nos condicionaron. Por suerte ganamos”.
Pensando en lo que viene, Merlini subrayó la importancia de mantener la concentración: “Puede ser un envión anímico muy importante el triunfo con River, pero no hay que relajarse. Ojalá que el lunes juguemos con buenos resultados, salvados del descenso, y apuntar a quedar entre los ocho mejores”.
En cuanto al vínculo con la hinchada, el ex San Lorenzo fue claro: “El aliento de la gente lo sentí desde el primer momento que me tocó estar en el club, es gratificante. Con Orfila no me estaba tocando de arranque, pero yo me sentía muy confiado”.
Por último, se refirió a la situación institucional que atraviesa el club: “Sabemos lo que sufre el hincha y cómo igual llena la cancha. En lo institucional, uno como jugador no puede hacer mucho. Personalmente trato de aislarme un poco, porque lo que podemos hacer es en la cancha. Obvio que uno lo escucha y lo siente”.
Con la cabeza puesta en Vélez y Platense, el Lobo busca sostener el envión tras una victoria que, más que tres puntos, significó un desahogo y una muestra de carácter.
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