El plantel Mens Sana volvió a los entrenamientos con buen ánimo y un sólo objetivo: cambiar la cara que dejó ante Central, para volver a meterse en el lote de los primeros. Pese a la derrota, el equipo está esperanzado de que puede mejorar la perfomance.
La derrota en Rosario fue un llamado de atención para el equipo que yacía invicto en 2017. No debe volver a repetir la imagen dejada en el Gigante de Arroyito. Por ello, los jugadores se presentaron a Estancia Chica, cambiaron el chip y sentaron cabeza. La mira está puesta en San Lorenzo que, de vencerlo, alcanzarán su línea de puntos.
El entrenamiento estuvo dividido en tres. En primer término, gimnasia para todos. Luego de media hora en el Campus Timeoteo Griguol, se trasladaron a las canchas 3 y 4 para realizar movimientos regenerativos y fútbol reducidos.
Una vez en las canchas, Gustavo Alfaro, mantuvo una charla de más de media hora con sus dirigidos. Habló respecto al partido perdido y lo que se viene. El DT fue muy autocrítico pero sabe que la derrota de San Lorenzo, y los empates de Estudiantes, Boca y River le dieron una nueva oportunidad en la Copa. Aunque Racing estiró la brecha con Gimnasia, e Independiente lo empató.
Por otro lado, Lucas Lobos y Maximiliano Coronel, quienes ya habían comenzado a trotar, tuvieron tareas con pelota, bajo la atenta mirada del kinesiólogo Jorge Murúa. El Cuepo Técnico, tanto como el médico, aspiran a que el 10 y el defensor regresen para enfrentar a Ponte Preta en el Bosque.
En última medida, a Ramiro Carrera se le realizarán estudios debido a la molestia sufrida el pasado sábado. Todo indica que padece una mialgia en el isquiotibial derecho y quedaría fuera de consideración mínimo dos semanas. Mientras que Mauricio Romero sufrió un fuerte dolor por el pisotón de Marco Ruben pero no pasó a mayores y podrá ser de la partida ante San Lorenzo.
Por Lucas Bolosin
Ph:Nicolás M. Braicovich
Dejar una contestacion