Gimnasia perdió en San Martín con Chacarita por 2 a 0 en lo que fue la octava fecha de la Superliga y sólo acumula 7 puntos. El equipo de Soso tenía que ganar para consolidar lo logrado, pero no tuvo reacción frente a un rival necesitado de resultados. Sin regularidad en rendimientos, hoy es el equipo más goleado del torneo.
Este Lobo no es el que fue el domingo. Esta versión no le sienta bien. Venía empoderado con cuatro goles en su haber y un buen rendimiento producto de un despliegue de juego colectivo el pasado domingo en el Bosque frente a Vélez, donde todo salió bien. Había que ganar para reafirmar lo logrado y robustecer la confianza. El rival parecía ser endeble y llegar vulnerable al encuentro pero estaba necesitado de triunfos y puso todo para conseguirlo. Chacarita venció al Lobo de Mariano Soso por 2-0 con goles de Federico Rosso y del ex Gimnasia, Mauro Matos.
El único cambio fue Ezequiel Bonifacio por Facundo Oreja quien sufrió una rotura fibrilar del recto izquierdo y que, si bien fue de la partida el domingo pasado, debe estar fuera. Se trata de un leve desgarro el que sufre el lateral pero debería cuidarse al menos tres semanas.
Mariano Soso formó con el siguiente equipo: Alexis MARTÍN ARIAS; Ezequiel BONIFACIO, Manuel GUANINI, Omar ALDERETE, Lucas LICHT; Lorenzo FARAVELLI, Fabián RINAUDO, Nicolás COLAZO; Brahian ALEMÁN; Nicolás DIBBLE, Nicolás MAZZOLA. En el banco estuvieron: Yair BONNIN, Oliver BENITEZ, Agustín BOLIVAR, Matías NOBLE, Eric RAMIREZ, Nicolás IBÁÑEZ y Franco NIELL. El número 19 fue para el juvenil Matías MELLUSO.
El Lobo venía entonadísimo y en los primeros minutos de juego en San Martín parecía querer repetir la actuación frente al Fortín. Manejaba el juego controlando la pelota pero sin peligrar al rival. Aparecía Nicolás Mazzola de cabeza tras un centro del uruguayo Alemán, pero sin riesgo. A los 26 minutos, la más clara del primer tiempo: tiro libre de Brahian Alemán que exigió al arquero del funebrero, Pedro Fernández, para despejar el remate. Más tarde intentaron sin éxito Faravelli y Guanini de cabeza. Ninguno de los dos casos fue una amenaza para el rival.
El Lobo proponía con dificultades, pero Chacarita encontró los espacios ofrecidos por los triperos -sobre todo por la banda izquierda- y a los 41´ encontró el gol en la cabeza de Federico Rosso tras un córner. Final de la primera etapa. Había que levantar cabeza, pero Gimnasia entró desdibujado, los de San Martín aprovecharon la ocasión y, en el arranque del segundo tiempo, al minuto de juego, Mauro Matos estampó el segundo y selló el resultado.
De ahí en más, todo costó el doble. A los 25´ probó Alemán de cabeza pero fue al travesaño. Avances sin fortuna, errores e imprecisiones triperas, más un rival cerrado hicieron imposible revertir el resultado. Esta versión de Gimnasia es la menos atractiva: desordenada por momentos, desesperada por otros. No se pudo mantener el nivel alcanzado el domingo pasado y preocupa.
Chacarita llegaba presionado, con sólo dos empates en lo que va del torneo y cosechó sus primeros tres puntos frente a Gimnasia. Que la esperanza no quede dañada, sin dudas. El proyecto y la idea se bancan, pero las vidas se acaban. A barajar y dar de nuevo. La próxima es contra Patronato y hay que ganar.
Piru Ferreyra
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