
Como era de esperar, Nelson Insfrán volvió a tener una actuación destacada frente a Independiente. “El Mono” integró el podio del Lobo y coronó su gran tarde con una tapada a quemarropa ante Ignacio Pusetto sobre el final.
Gimnasia sumó sus primeros tres puntos en el Torneo Clausura y Nelson Insfrán volvió a tener un rol preponderante en distintas etapas del partido. Tal como viene ocurriendo en sus últimas presentaciones, esta vez ante Independiente, el nacido en Formosa se puso el traje de figura y lo confirmó con una atajada decisiva al remate de Ignacio Pusetto a quemarropa sobre el final del encuentro. Con reflejos, seguridad y voz de mando, el arquero fue determinante en los momentos clave y se consolida como uno de los puntos altos del equipo en este arranque de semestre.
El conjunto tripero volvió al triunfo después de tres partidos, teniendo en cuenta la eliminación en la Copa Argentina y las dos primeras fechas del Clausura. El resultado no solo significó un alivio necesario y algo de oxígeno en la lucha por escapar de los últimos puestos de la tabla anual, sino también una bocanada de aire fresco en un contexto cargado de incertidumbre, donde parecía que nada salía. La presión por ganar crecía fecha a fecha, y en ese escenario adverso, el equipo mostró carácter, personalidad y convicción para cortar la racha negativa.
Además del gran nivel colectivo, el Lobo empieza a encontrar en Insfrán una garantía bajo los tres palos, alguien que responde cuando más se lo necesita y que transmite confianza a una defensa que se viene afirmando. Lejos de los flashes, el arquero formoseño se ganó su lugar en base a trabajo y rendimiento, y hoy es uno de los pilares de un equipo que busca reconstruirse desde la solidez.
A pesar de la llegada de Luis Ingolotti y las luces de haberse coronado con Central Córdoba en la Copa Argentina, tras la salida de Marcelo Méndez, Fernando Zaniratto le devolvió el puesto bajo los tres palos a “Mono” Insfrán. Desde aquel encuentro frente a Deportivo Español por Copa Argentina, el surgido en Estancia no salió más.
En lo que va del 2025, Nelson Insfrán acumula nueve vallas invictas en todas las competencias, lo que representa una efectividad del 50% en ese aspecto. Un dato que habla de su solidez y regularidad. En los demás encuentros, recibió 13 goles, aunque ese promedio viene en descenso en las últimas presentaciones, reflejo de una mejora tanto individual como colectiva en el fondo.
La sólida actuación de Nelson Insfrán no solo representa un pilar fundamental para el presente de Gimnasia, sino que también ilusiona con un futuro más estable para el equipo. Su capacidad para responder en los momentos decisivos y mantener la portería en cero con regularidad aporta seguridad a un conjunto que aún busca consolidarse. Más allá de la estadística, su liderazgo desde el arco contagia confianza a sus compañeros y se convierte en un símbolo de resistencia y compromiso en un plantel que atraviesa una etapa de reconstrucción.
Dejar una contestacion