Jan Hurtado aprovechó la pretemporada y se ganó la confianza de Orfila, convirtiéndose en el goleador de los amistosos y perfilándose como el 9 titular. Atraviesa su mejor momento desde su regreso a Gimnasia y le ganó el puesto a Rodrigo Castillo.
Gimnasia busca resultados que le permitan salir de los últimos puestos de la tabla anual y alejarse de la zona de descenso. Alejandro Orfila asumió tras la salida de Diego Flores y sabe que está obligado a mostrarle al hincha otra versión del equipo desde la primera fecha del Torneo Apertura. “El Chano” necesita un plantel comprometido, y eso es justamente lo que intenta inculcar desde el primer día de pretemporada.
El Lobo está próximo a cerrar la etapa de preparación antes del inicio de la competencia oficial y llega con un saldo positivo: ganó los dos amistosos que disputó hasta ahora. Venció 1-0 a Defensa y Justicia en Florencio Varela y repitió resultado frente a Aldosivi en el Bosque. En ambos partidos, el único goleador fue Jan Hurtado, quien le ganó la pulseada a Rodrigo Castillo y se perfila como el 9 titular en el arranque del ciclo Orfila.
Hurtado llegó al club en 2018 y, con el correr de los partidos, se ganó un lugar en la consideración de Pedro Troglio. Su momento más recordado fue en la Copa Argentina, con aquel gol agónico a Boca en Córdoba que metió a Gimnasia en los cuartos de final. Esa noche quedó grabada en el corazón del hincha, y su explosión ofensiva llamó la atención de Boca, que pagó cinco millones de dólares por su pase a mediados de 2019.
Sin embargo, en Boca no tuvo continuidad ni logró afirmarse. Buscando rodaje, fue cedido a diferentes clubes de Sudamérica. Su paso más destacado fue en el Bragantino de Brasil, donde disputó 79 partidos y convirtió ocho goles. También jugó en Goianense (Brasil) y Liga de Quito (Ecuador). En 2025 rescindió su contrato con el Xeneize y firmó como jugador libre con el Lobo.
Su regreso a Gimnasia se dio sobre el final de la pretemporada de verano. Diego Flores lo llevó al banco de suplentes y compartió minutos con Castillo. Pero la llegada de Orfila cambió su panorama: lo eligió como su delantero titular para este nuevo ciclo. Si bien varios clubes de la MLS mostraron interés, desde la dirigencia de Gimnasia no están dispuestos a dejarlo partir. Entre sus dos etapas en el club, Hurtado jugó 35 partidos y marcó cinco goles, aunque todavía no convirtió desde su regreso.
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