Gimnasia cerró su participación en la Superliga 2018/2019 con una victoria ante Colón de Santa Fe en el Bosque. Fue 3 a 2 con goles de Fernando Zuqui en contra, Jan Hurtado y Horacio Tijanovich, y explosión en un Juan Carmelo Zerillo repleto. Rápidamente el Lobo piensa en el debut de la Copa de la Superliga, sin descanso.
Había que ganar y se ganó. Si es cierto que para lo que viene hay que mejorar ciertas desatenciones que llevan a confusiones dentro del campo de juego, apuntar a lograr un equilibrio durante los partidos y no “correr sin fundamento”. Pero el triunfo de esta tarde por 3 a 2 ante Colón de Santa Fe es un enorme envión para afrontar la próxima temporada. Y los tres puntos un espaldarazo para el grupo que busca seguir engrosando el promedio.
Se convirtió, además, y tres veces. El primero, el de Zuqui en contra, fue la mitad de Jan Hurtado. Más bien, todo suyo. A los cuatro minutos del inicio del partido, “la motoneta venezolana” tomó la pelota en el centro de la cancha y se la llevó hasta el fondo para tirar un centro al ras del piso que buscaba al juvenil Chávez pero que terminó empujando el rival dentro de su propia red, cuando intentaba despejar.
Enloquecieron los triperos y las triperas que se agolparon en todo el estadio y, claro, la preocupación lógica: ¿y ahora, qué hacemos, podremos aguantar el resultado? Sobre todo porque el Lobo aflojó la intensidad y el sabalero empezó a acomodarse, sin dañar, pero avanzaba, y tuvo su primera chance al cuarto de hora con un remate de media distancia que encontró a Alexis Martín Arias.
Pero inmediatamente el equipo del Indio retomó las acciones buscando ser más agresivo que el de Lavallén. Y, así como al venezolano se le adjudica la mitad del primer tanto, es justo darle la mitad del segundo a Braian Mansilla de un enorme partido. A los 25 minutos de la primera etapa, agarró la pelota y encaró entre rivales, lanzó un hermoso centro a la cabeza de Jan Hurtado que se encontraba en el área rival y que se elevó y cabeceó hacia abajo, a la izquierda del arquero, imposible. Ejecución impecable.
Las cosas parecían ir viento en popa en el Juan Carmelo, 2 a 0 y a pocos minutos de los vestuarios. Pero hacia el final de la primera parte, Nazareno Arasa cobró un penal un tanto dudoso para el rival que supo capitalizar en gol. Descuento para los sabaleros y entretiempo.
Ya en el segundo tiempo, Alexis Martin Arias le tapo un zurdazo de cortísima distancia a Leguizamón, podría haber sido el empate. Sin embargo, Gimnasia insistió en un partido parejo en las acciones.
Veintidós minutos y apareció él. Tijanovich, una vez más, para descontrolar el verde Bosque pincelado de Azul y Blanco. Anticipó inteligentemente al arquero Burián, gambeta para acá, gambeta para allá, evadió al arquero y al defensor, y la empujó para marcar el 3 a 1. Hay quienes hablaron de “jugada maradoniana” de Tija. Lo dijeron, lo mencionamos.
Siete minutos más tarde llegó el gol del descuento del rival, 3 a 2 y el nerviosismo que empezó a ser protagonista del juego. El fantasma del empate contra San Lorenzo, sobre la hora reapareció. Y se sufrió hasta el final.
Ganó Gimnasia y se queda la tranquilidad de haber sumado los tres puntos en juego que le inflan el promedio y sirvieron para igualar la línea de Newell´s de 56 puntos, tras el empate de la Lepra ante Banfield. Mañana juega Central, otro a quien el Indio Ortiz tiene en la mira. Acumuló 11 unidades de 18 en juego, lindo número. Ahora espera por la definición de cruces por la Copa de la Superliga.
Los once fueron: Alexis MARTÍN ARIAS; Facundo OREJA, Maximiliano CORONEL, Gonzalo PIOVI, Lucas LICHT; Agustín BOLIVAR, Lorenzo FARAVELLI, Horacio TIJANOVICH; Lautaro CHÁVEZ; Jan HURTADO. Ingresaron: Matías Gómez, Agustín Ramírez (debut) y Franco Mussis, por Lautaro Chávez, Braian Mansilla y Lorenzo Faravelli.
LOS GOLES
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